El Migliaccio es un dulce típico de la tradición napolitana de consistencia cremosa y suave, a base de huevos, requesón de oveja, leche y sémola, aromatizado con agua millefiori, naranja y limón.
Su particularidad es que se derrite en la boca casi como si fuera una mousse: el relleno es muy similar, por su textura e ingredientes, al de la sfogliatella napolitana y, de hecho, en Nápoles también se llama "sfogliata".
Se prepara tradicionalmente con ocasión del Carnaval, pero también se puede disfrutar en primavera y durante todo el período pascual.
Parece que la receta original incluía el uso del mijo, del que toma su nombre; con el paso de los años, sin embargo, fue reemplazado por la sémola. Otro ingrediente imprescindible era la sangre de cerdo, una costumbre que se ha perdido con los años.
Prepararlo no es nada difícil: se comienza haciendo crema de sémola con leche, agua, azúcar, cáscaras de cítricos, vainilla, mantequilla y sémola. Después se prepara la crema de ricotta, se unen las dos masas y se hornea durante unos 50 minutos. ¿El toque final? ¡El polvo de azúcar en polvo en la superficie!
¡Así se prepara el mijo!
Categoría: Postres
Prepare la crema de sémola: en una cacerola vierta la leche y el agua, agregue 45 gr de azúcar, cáscaras enteras de una naranja y un limón, vainilla y mantequilla [1].
Revuelva a fuego medio y cuando la mantequilla y el azúcar se disuelvan, agregue la sémola mezclando con un batidor a mano. Baje el fuego y cocine durante unos minutos hasta obtener la consistencia cremosa de una polenta. Retire las cáscaras y deje enfriar completamente, tal vez distribuyendo la crema en un plato o bandeja con película de contacto [2].
Batir durante unos instantes los huevos con el azúcar restante, las cáscaras ralladas de un limón y una naranja, y otra cucharadita de vainilla [3].
Agregue también el requesón (preferiblemente tamizado con un colador) y mezcle todos los ingredientes con un cucharón de madera (o batidores eléctricos) [4].
Por último, añadir la crema de sémola ya fría y el aroma de flores [5].
Distribuir la mezcla obtenida en un molde circular que se puede abrir de 20-22 cm, con mantequilla y enharinado.
Nivelar bien y cocinar el mijo a 175° (horno estático ya caliente) durante unos 50 minutos. Hornee y deje reposar durante una hora antes de hornear. Cuando esté completamente frío, espolvoree con azúcar en polvo y sirva [6].
El mijo es un postre barato, no hay ingredientes caros. Es bueno, delicado, esponjoso y en esta versión también ligero.
Es adecuado para toda la familia, les gusta a jóvenes y mayores.
Puede omitir el aroma de las flores y reemplazarlo con la vainilla. Puede agregar naranjas confitadas y cedro en cubos o pasas.
Se puede congelar, entero o ya en rodajas, durante 2-3 meses.
El mijo debe disfrutarse frío, al menos 4-5 horas, incluso mejor al día siguiente para dar tiempo a todos los ingredientes y sabores para fundirse perfectamente.
El pastel se conserva a temperatura ambiente durante 3-4 días.
Para celebrar el Carnaval
La receta original, de origen campesino, preveía un ingrediente que actualmente está en desuso: la sangre de cerdo.
En aquellos tiempos, también podía tener uno porque, había menos dinero y menos posibilidades, en el campo y en la granja se comía lo que se producía y el dicho "del cerdo no se tira nada" es también la confirmación de esta verdad.
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